jueves, 10 de mayo de 2007

El corazón...grande. La casa...chica.



Miles de departamentos y millones de personas viviendo dentro de ellos. Hay de diferentes tamaños y en cada uno se esconde una historia. Qué pasa detrás de sólo cuatro paredes? Quizás al leer esto te sientas como en casa. Estudiás? Viniste desde lejos? Vivís solo? En una caja de zapatos? A veces no queda otra. Dormimos, estudiamos, comemos en un mismo sitio. Ni hablar de las numerosas cosas inútiles que vamos trasladando de un lugar a otro...ese Superman de cuando eras chico, fotos, adornos de los viajes...Y a medida que pasan las materias de la facultad, pilas de fotocopias ocupan ese lugar que ya no es suficiente. Alguna planta aporta con su presencia para darle oxígeno a tu burbúja. Otra cosa...cuidado con lo que cocinás!! Que no se te ocurra comer papas fritas porque la fragancia invade hasta el rincón más oscuro de tu placárd. También es el lugar de reunión no?? Claro, no hay nadie que moleste. Avisás que si quieren comer traigan sus cubiertos porque tenés sólo tres pares y los últimos en llegar terminan sentados en el rincón de las penitencias. Extrañás tu casa? Tu parque? Tu cama? Tranquilo...no falta tanto para las vacaciones.

1 comentario:

Boniato18 dijo...

Muy buen posteo che! parece que describiste mi casa. Se me piantó un lagrimón!!!!.

Poncho Pilatos
(de La Ropa es lo de menos)